Camiseta a dos franjas, una azul y otra blanca, en honor al Blackburn Rovers, equipo preponderante de la época (ese al que trituró el Corinthian, por cierto). Gene Winfield se encargó con su equipo de construir los 25 vehículos que se fabricaron específicamente para el filme. En 1909 llegó el viaje que lo cambió todo. Así, en Southampton, ciudad portuaria desde donde iba a volver con las manos vacías, se arriesgó.